El Sindicato de Camioneros, liderado por los Moyano, se encuentra en medio de un dilema que ha generado tensiones tanto con el gobierno como con las cámaras empresariales. La amenaza inicial de Pablo Moyano de paralizar el país fue seguida por un repentino cambio de postura. Anunciaron que la decisión final se tomará en un plenario este jueves, presidido por su padre, Hugo Moyano.
La postura del gabinete nacional
El gobierno, por su parte, no cedió ante las amenazas y anunció que no homologará la última paritaria del sindicato. Calificaron cualquier paro como ilegítimo y un intento de presionar fuera de los límites del Estado de Derecho. Este enfrentamiento ha dejado al sindicato sin muchas opciones claras y con una postergación en la toma de decisiones respecto a la medida de fuerza.
“Perjudicará a todos los argentinos para presionar en obtener un dictamen favorable para él (Moyano), y esto es violentar el Estado de Derecho”, aclaró la Secretaría de Trabajo
En medio de este escenario, Pablo Moyano ha expresado su descontento con la postura gubernamental. Acusó al ministro Caputo de interferir en las negociaciones y limitar los aumentos salariales. También, Moyano ha cuestionado la injerencia del gobierno en las negociaciones entre privados y ha criticado la imposición de techos salariales.
“Que no se meta el ministro… Hay una extorsión de parte de Caputo apretando a las cámaras empresarias de todo el país para que no se pague este salario digno que hoy tiene que cobrar un chofer de camión”, expresó Hugo
Para el gobierno, tener como antagonista a un dirigente como Pablo Moyano puede ser políticamente beneficioso. Permite exhibir a un representante sindical como obstáculo para la estabilidad económica, especialmente en lo que respecta a la inflación. Esta estrategia gubernamental busca mostrar la disposición a cerrar paritarias dentro de límites razonables.
“El gobierno ha agarrado como enemigo al sindicalismo en su conjunto y en particular nuevamente la derecha a Camioneros y a los Moyano”, dijo Pablo
Incertidumbre sobre el paro
Sin embargo, la incertidumbre persiste en el gremio de Camioneros, que avanza hacia un paro sin un plan alternativo claro. La falta de conciliación obligatoria por parte del gobierno podría exponer a los sindicalistas al malestar público por los efectos de las medidas de fuerza, lo que podría generar tensiones adicionales en la sociedad.
Los sindicalistas plantean la posibilidad de convocar desde la CGT a un paro general que dure 48hs. Especialmente porque consideran que las políticas del gobierno de Milei llevan a la “precarización total” de los trabajadores y aspiran a que la próxima administración nacional esté en manos de Axel Kicillof.
“Si Dios quiere, (Kicillof) será el futuro presidente de la Nación… tiene muchas posibilidades de ser el nuevo conductor del peronismo”, confirman desde el gremio
En medio de este conflicto, la figura de Hugo Moyano ha convocado a cámaras empresariales para discutir un nuevo aumento salarial, aunque se enfrenta a resistencia por parte de algunas pymes. Mientras tanto, el cierre de paritarias en otros sectores dentro de los límites establecidos por el gobierno indica una estrategia gubernamental para debilitar la posición de los Camioneros.


