El gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) mantuvieron ayer una reunión clave en la Casa Rosada. Se busca lograr un avance en la renegociación de la deuda de 45.000 millones de dólares que contrajo el país con el organismo. El encuentro duró una hora y media y participaron el ministro de Economía, Luis Caputo, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y dos representantes del FMI: Luis Cubeddu y Ashvin Ahuja.
«La reunión fue positiva, los equipos técnicos seguirán trabajando en los próximos días con la intención de emitir un comunicado en conjunto con las conclusiones de la visita» – aseguran desde el gobierno
En busca de un acuerdo
El objetivo de la reunión fue negociar las condiciones y buscar una salida al Acuerdo de Facilidades Extendidas que se encuentra virtualmente caído por incumplimientos del gobierno anterior. Además, se busca acceder a USD 3.600 millones que no fueron desembolsados el año anterior y permitirían aliviar el pago de un vencimiento que se aproxima.
«Lo único que hoy se está intentando es reflotar es el acuerdo caído en virtud del incumplimiento sistemático que ha tenido el país con el organismo» – afirmó el vocero presidencial
El ministro de Economía Caputo expresó una disculpa al FMI por las irresponsabilidades por parte de la gestión anterior respecto de las metas establecidas. La relación entre el organismo y el ministro se mantiene en buenos términos, incluso el FMI avaló las primeras medidas económicas de Caputo para el país.
Las conversaciones continuarán hasta el miércoles, cuando se espera que los emisarios del FMI concluyan su visita al país. Se produjo así, el primer “cara a cara” entre los principales negociadores de ambas partes, luego de varios encuentros previos entre equipos técnicos.
Se utilizarán los fondos ya previstos
El vocero presidencial, Manuel Adorni, aseguró que el gobierno no pedirá “fondos frescos” al FMI. En su lugar, se intentará acceder a los que ya estaban previstos en el acuerdo original. También, descartó que se vaya a implementar un nuevo programa, ya que eso implicaría pasar por el Congreso. Adorni afirmó que, dadas las circunstancias, “no debería haber inconvenientes para que no se reflote” el acuerdo.
Caputo llevó a cabo la séptima renegociación del acuerdo entre Argentina y el FMI. Se busca lograr el acceso a los USD 3.600 millones, que son producto de los USD 2.600 millones correspondientes a noviembre, sumado a los USD 1.000 millones que se adelantarían del giro que debía efectuarse en marzo de 2024. El gobierno espera lograr una extensión de los plazos y una reducción de las tasas de interés para aliviar la carga de la deuda.
«Todo lo que estamos haciendo está en línea con que con creces van a ser satisfechas esas nuevas metas que se impongan porque el plan que estamos llevando adelante es de un orden en las cuentas y varios aspectos de la economía y no debería haber ningún tipo de inconveniente» – aclaró Adorni