La gestión de Omar Yasin al frente de la Secretaría de Trabajo del Ministerio de Capital Humano ha concluido abruptamente tras menos de 100 días en el cargo. El presidente Javier Milei lo responsabilizó de un “error” significativo: la implementación de un aumento salarial del 48% para ministros y otros altos funcionarios, incluyendo el sueldo presidencial. Este incremento, que contradecía el mensaje de austeridad promovido por el gobierno libertario, desencadenó la salida de Yasin y su posterior reemplazo por Julio Cordero. Ahora nuevas polémicas envuelven la Secretaría, esta vez con José Ignacio López Montoiro en el centro de la escena.
Irregularidades en las “unidades retributivas”
Antes de este incidente, Yasin había autorizado otro notable aumento salarial. José Ignacio López Montoiro, subsecretario de Gestión Administrativa del área de Trabajo, recibió en enero un adicional de casi $2.500.000 mediante “unidades retributivas”. Supuestamente, estas representan pequeños montos adicionales que suman al sueldo base de los funcionarios públicos. Estas unidades, valoradas en casi $490 cada una según el decreto 206/2024, también firmado por el presidente y otros altos funcionarios, fueron el centro del escándalo que precipitó la renuncia de Yasin.
La mayoría de los funcionarios de Trabajo reciben entre 20 y 500 unidades retributivas. Sin embargo, López Montoiro contó con 5000 de estas unidades en enero, una cifra excepcionalmente alta. No fue el único caso: María Marcela Flores, secretaria del exjefe de área, también registró 5000 unidades adicionales, lo que se traduce en un sobresueldo similar.
Un ex-funcionario se duplicó el sueldo sumandose miles de 'montos extras' y se fue A LA CALLE pic.twitter.com/2hml50qwNP
— Agarra la Pala (@agarra_pala) March 25, 2024
Las últimas bajas en Capital Humano
Tras la controversia, se solicitó la renuncia de López Montoiro, quien ya la presentó, y no será parte del equipo de Cordero. María Marcela Flores, con nueve años de antigüedad, ha vuelto a sus funciones previas con un sueldo ajustado a su posición. Entonces, se tomaron decisiones correctivas:
“Fue una avivada y se tomaron medidas. Ninguno de los dos sigue desempeñando funciones”
En el círculo cercano a Yasin, se argumenta que la asignación de unidades retributivas a López Montoiro buscaba equiparar su sueldo a las responsabilidades de subsecretario, un cargo que no había sido formalizado debido a demoras en los nombramientos por parte de Sandra Pettovello. Este ajuste se sumó a los más de $300.000 que López Montoiro ya percibía antes de su designación oficial el 15 de febrero. Si se confirma su salida, se sumará a la reciente renuncia de Marcelo Rubén Basilotta, marcando otra baja en la cartera dirigida por Pettovello.


