Según fuentes cercanas al presidente brasileño, Lula le brindó su respaldo explícito a Massa y le cedió a su principal estratega electoral, con quien el ministro se reunió la semana pasada en San Pablo. Lula también impulsó el ingreso de Argentina a los Brics, el bloque de potencias emergentes integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
Edinho Silva, el hombre que ordenó la campaña de Lula
Edinho Silva es un dirigente de larga trayectoria en el Partido de los Trabajadores (PT), fue concejal, diputado, presidente del PT de San Pablo y secretario de Comunicaciones del gobierno de Dilma Rousseff en 2015. Además, es intendente de la ciudad paulista de Araraquara.
Silva se encargó de ordenar la campaña de Lula cuando ésta atravesaba un momento de desorden interno y riesgo de descarrilamiento por las declaraciones polémicas del candidato. Logró moderar el discurso de Lula, cambiar su imagen y tejer alianzas con distintos sectores y espacios políticos para conformar una coalición amplia y diversa.
Massa reestructura su campaña y suma a los brasileños
El ministro de economía aplicó una profunda reestructuración a su campaña, sumando a Juan Manuel Olmos y su esposa Malena Galmarini, al comando que hasta ese momento estaba en manos del camporista Wado de Pedro. La semana pasada circuló fuerte el rumor que Massa había corrido al catalán Antoni Gutiérrez-Rubi del comando de su campaña. La versión fue desmentida, pero la incorporación de Silva parece confirmar que el catalán perdió peso en la estrategia electoral.
El ingreso del brasileño Edinho Silva al equipo de Massa se terminó de cerrar la semana pasada cuando el ministro mandó a gente de confianza a San Pablo a reunirse con el estratega, según LPO. Los miembros del equipo de Silva están en Buenos Aires desde el domingo y esperan quedarse hasta culminar el proceso electoral. Se enfocarán en las estrategias de redes sociales y en la preparación del primer debate presidencial, que se realizará el próximo jueves 19 de octubre.
Massa espera dar el batacazo y disputarle la presidencia a Milei
El equipo de Massa y los brasileños coinciden en que la elección argentina va camino a una polarización extrema entre Milei y el kirchnerismo, similar a la que se dio entre Lula y Bolsonaro. Por eso, buscan construir un discurso propio, aprovechar las capacidades y diseñar una estrategia en redes sociales que pueda competir con la efectiva campaña digital de Milei.
Massa viene renegando hace rato de su campaña digital, que considera muy acartonada e institucional y con poco gancho para el electorado joven, que hoy se inclina por Milei. Y es este precisamente el fuerte de Silva, que supo captar el interés y la adhesión de los jóvenes brasileños con propuestas innovadoras y creativas.
Massa espera que con el apoyo de Lula y la incorporación de Silva a su equipo pueda revertir las encuestas que lo ubican en tercer lugar, lejos del ballotage. El ministro confía en que podrá dar el batacazo en las elecciones del 22 de octubre y disputarle la presidencia a Milei en una segunda vuelta.
