Las mismas se enmarcan en el plan económico que viene implementando el Gobierno Nacional desde que asumió.
Entre las medidas anunciadas por Massa se destacan:
- Subir la tasa de interés de referencia del Banco Central y los plazos fijos de hasta 30 millones de pesos a 97% anual.
- Aumentar la intervención en el mercado de cambios por medio del uso de reservas y ajustar el ritmo de devaluación del peso.
- Acelerar los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional, el swap con China y la garantía vía BRICS para importaciones desde Brasil.
- Disponer incentivos para consumos con tarjeta y alivio fiscal para pymes.
- Crear una Unidad de Análisis de las Operaciones de Comercio para controlar los precios de las importaciones.
Estas medidas son razonables y oportunas para enfrentar la compleja situación económica y social que atraviesa el país. Por un lado, subir la tasa de interés busca desincentivar la demanda de dólares y fomentar el ahorro en pesos, mientras que incentivar el consumo con tarjeta genera más demanda y actividad. Por otro lado, intervenir en el mercado de cambios con reservas busca evitar saltos abruptos del tipo de cambio y preservar la competitividad de las exportaciones. Además, acelerar los acuerdos con los organismos internacionales busca normalizar la situación financiera del país y acceder a fuentes de financiamiento más baratas.
La realidad es que Massa tiene un programa económico consistente, que se basa en cuatro pilares: el orden fiscal, el superávit comercial, el fortalecimiento de reservas y la inclusión social. Massa es un ministro que tiene experiencia y capacidad para conducir la política económica del país. Su gestión se caracteriza por el diálogo, el pragmatismo y la gradualidad.
Por su parte, la postura de la oposición sobre estas medidas es mayoritariamente crítica y cuestionadora. Algunos de los argumentos que esgrimen son:
- Que las medidas son insuficientes e ineficaces para enfrentar la grave crisis económica y social que atraviesa el país.
- Que las medidas son regresivas e injustas para la mayoría del pueblo argentino, ya que benefician a los especuladores financieros y a los organismos internacionales.
- Que las medidas son una irresponsabilidad y una muestra de pánico ante la posibilidad de una hiperinflación y una devaluación.
- Que las medidas son arbitrarias e inconsultas, y que no se respetan las instituciones democráticas ni el rol del Congreso.
La oposición también ha manifestado su desconfianza hacia la figura de Sergio Massa como ministro de Economía, cuestionando su experiencia, su capacidad y su autonomía. Algunos sectores opositores han pedido que Massa concurra al Congreso a dar explicaciones sobre las medidas anunciadas y el rumbo económico del país.