En el tablero político argentino, una fotografía puede valer más que mil palabras. La reciente reunión entre la exdiputada Soher El Sukaria y Javier Milei, orquestada por la canciller Diana Mondino, ha acelerado las tensiones dentro del PRO. Se podría poner en jaque la relación entre el presidente electo del partido, Mauricio Macri, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
De Córdoba al mundo
El encuentro, que tuvo lugar en Córdoba, podría interpretarse como la capacidad de Macri para jugar cartas decisivas en momentos clave. Diana Mondino fue la encargada de acercar a Soher El Sukaria con Javier Milei. Ambas dirigentes mantienen una relación cercana y ejercen influencias en la política cordobesa.
La fotografía subida por El Sukaria, que destaca temas como la libertad de culto y el repudio al terrorismo, también revela la alineación ideológica con Milei. Sin embargo, el breve encuentro de 30 minutos fue suficiente para que Milei expresara su apoyo al bloque amarillo en Diputados y su satisfacción con Gabriel Bornoroni, destacando la importancia política de Córdoba.
“Juntos por el Cambio no existe más”
Este gesto ha agitado la interna del PRO, especialmente porque Bullrich reclama su lugar por el apoyo temprano al proyecto libertario. La diputada Laura Rodríguez Machado, una aliada de Bullrich en Córdoba, ya ha comenzado a explorar por sus medios una fusión con el partido libertario. Esto indica una lucha por posiciones estratégicas más allá de las listas electorales.
La visita de Rodrigo de Loredo a Macri y su posterior aparición pública con Luis Juez sugieren una estrategia para mantener la unidad de Juntos por el Cambio. Especialmente, frente a la posible candidatura de Juan Schiaretti. Estos movimientos podrían ser un intento de evitar deserciones a otras fuerzas políticas, como el caso de Javier Pretto, que actualmente se encuentra en el equipo de Daniel Passerini y Martín Llaryora.
Sin embargo, la situación se complica aún más con la afirmación de que “Juntos por el Cambio ya no existe más” para varios dirigentes. La coalición se desmorona y podría enredar a figuras como De Loredo y Juez en una contienda electoral con limitadas oportunidades para la alianza.
Además, con la división del PJ y la salida de Oscar Agost Carreño del bloque en diputados, el escenario político cordobés se prepara para una reconfiguración significativa. Mientras tanto, Macri mantiene un vínculo cercano con El Sukaria y espera pacientemente para retomar el control formal del PRO en 2025.