Después de un año lleno de expectativas sin límites, la inteligencia artificial (IA) generativa debe demostrar su capacidad para generar resultados concretos y escalar dentro de las organizaciones, creando un valor tangible.
Cobra relevancia con el tour del presidente en Silicon Valley, la meca de la IA.
La importancia de este desafío es inmensa. Según proyecciones de Goldman Sachs, en la próxima década, esta tecnología podría impulsar un aumento del 7% en el PIB global. Además, se anticipa un incremento sostenido en la productividad empresarial del 1.5% anual.
La transformación radical en la interacción con máquinas
La IA generativa ya está revolucionando la forma en que interactuamos con las máquinas, simplificando radicalmente el acceso a los recursos empresariales. Ahora, cualquier empleado puede dialogar con los sistemas corporativos como lo haría con un colega, obteniendo la información necesaria de manera rápida y sencilla. Esto es solo el comienzo. En un futuro cercano, estaremos rodeados de máquinas capaces de razonar y tomar decisiones por sí mismas. Sam Altman, una de las figuras más destacadas en el campo de la IA, augura que en las próximas décadas, «las máquinas harán casi todo, incluso nuevos descubrimientos científicos».
Optimismo en el mercado financiero
El entusiasmo de los bancos de inversión y los gigantes tecnológicos ha impregnado de optimismo todo el mercado. En el primer trimestre de 2024, las principales bolsas internacionales, impulsadas por el auge de la IA generativa, alcanzaron su nivel más alto en los últimos cinco años. Sin embargo, Gary Gensler, presidente de la SEC, advirtió sobre la conducta oportunista de algunas entidades que podrían estar engañando a los inversores afirmando el uso de inteligencia artificial sin realmente implementarla, una práctica conocida como «AIwashing».
Preocupación por la concentración del mercado
A medida que el mercado muestra esta exuberancia, también crece la preocupación por la concentración de la oferta. Actualmente, pocas empresas dominan eslabones clave de la cadena de valor, lo que genera una dependencia que condiciona el desarrollo y acceso a esta tecnología. La capacidad de desarrollar los modelos más avanzados, conocidos como «frontier AI models», está reservada a un grupo muy reducido de empresas, debido a los elevados costos y la escasez de recursos computacionales, datos y talento especializado.
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La importancia de la capacidad de cómputo
Durante la fase de entrenamiento de un modelo de IA generativa, se requiere una gran capacidad de procesamiento. La calidad del resultado es proporcional al cómputo empleado. Esta característica diferencial de la IA generativa explica por qué crear ChatGPT-4 costó aproximadamente 50 millones de dólares, al menos 10 veces más que su predecesor, ChatGPT-3. Además del costo, la escasez de recursos computacionales es un desafío significativo. Elon Musk comparó recientemente la dificultad de conseguir GPUs con la de comprar drogas, destacando la oferta insuficiente de estos componentes cruciales.
La escasez de talento especializado
El mundo cuenta con aproximadamente 140.000 ingenieros expertos en inteligencia artificial repartidos en unas 20.000 empresas, según el informe «El estado del talento IA 2024» de la consultora Zeki. Sin embargo, solo unas pocas centenas poseen las habilidades necesarias para desarrollar modelos en la frontera de la IA. Las startups suelen tener menos de una docena de ingenieros entrenando sus modelos, y contratar a estos especialistas implica pagar cifras exorbitantes. Más del 80% del presupuesto para desarrollar un modelo se destina a cubrir los costos de computación.
El valor de los datos
Los datos han pasado de ser considerados meras materias primas a ser reconocidos como una fuente de diferenciación crucial. La calidad de los datos permite crear modelos más precisos y eficientes. Los proveedores de IA generativa están llegando a acuerdos con creadores de contenido para acceder a información actualizada y especializada. Pocas empresas desarrollan modelos basados en sus propios datos; Bloomberg es una excepción notable, habiendo creado BloombergGPT utilizando su vasta base de datos financieros.
Ganadores y perdedores en el mercado
En el panorama actual, Nvidia emerge como el claro ganador, beneficiándose significativamente de la demanda de chips necesarios para la IA generativa. Los proveedores de servicios en la nube están invirtiendo fuertemente en expandir su infraestructura y capacidad de cómputo. Estas inversiones, necesarias para monetizar sus servicios, los están empujando a ofrecer capacidad de cómputo a startups a cambio de participaciones en ellas y a captar talento especializado de manera discreta para evitar sospechas del regulador.
Futuro incierto pero prometedor
El juego de la inteligencia artificial generativa se desarrolla a gran velocidad y con muchos intereses en juego. Los gigantes tecnológicos están moviendo sus fichas para asegurarse el dominio del mercado, pero la partida aún no está decidida. Mientras tanto, el entusiasmo y las expectativas continúan elevándose, con la promesa de que la IA generativa transformará profundamente no solo la economía global, sino también nuestra vida cotidiana.
En definitiva, la carrera del queso de la inteligencia artificial está en pleno apogeo. Con avances tecnológicos, desafíos económicos y una competencia feroz, el desarrollo de la IA generativa promete ser una de las historias más emocionantes y transformadoras de nuestra era.
ZY