El gobierno de España ha decidido enfrentar de manera decidida el acceso de menores a contenido para adultos. Con la presentación de un nuevo sistema de verificación de mayoría de edad, se busca restringir el acceso a estos contenidos en internet. Este sistema, denominado Cartera Digital Beta, estará disponible a finales del verano español y funcionará mediante un carnet digital. Los usuarios deberán identificarse con su DNI electrónico para obtener un bono de 30 credenciales, válidas por 30 días, permitiendo tres usos por credencial en la misma plataforma.
La Estrategia Nacional de Protección de la Infancia y la Adolescencia en el Entorno Digital, impulsado por Pedro Sánchez, incluye un anteproyecto de ley orgánica que contempla controles parentales de fábrica en todos los dispositivos electrónicos. Además, se implementarán mecanismos efectivos de verificación de edad en las plataformas digitales.
Para asegurar el cumplimiento de estas medidas, se está trabajando en una modificación de la Ley General de Telecomunicaciones, permitiendo que la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) pueda bloquear plataformas que no implementen sistemas de verificación de edad. El Gobierno mantiene conversaciones con proveedores de internet como Movistar y Vodafone para facilitar estos bloqueos.
¿Cómo sale a la cancha la normativa?
En esta fase beta, solo se obligará a las plataformas establecidas en España a cumplir con estas medidas, aunque el Gobierno aspira a que aplicaciones de mensajería, redes sociales y navegadores, también verifiquen la edad de sus usuarios.
La Cartera Digital Española, disponible en formato de aplicación móvil, incluirá otros documentos como el certificado de empadronamiento y titulaciones universitarias, garantizando la protección de datos mediante credenciales anónimas identificadas con una letra K.
La credencial anónima no contendrá datos personales, solo una identificación que confirmará la mayoría de edad del usuario. La aplicación se desbloqueará mediante reconocimiento facial, un patrón o un código. La Secretaría General de Administración Digital será la encargada de proveer estas credenciales, asegurando que la persona que solicita acceso es mayor de edad mediante la lectura del DNI electrónico o la consulta de registros administrativos. Además, habrá listas blancas de emisores de credenciales, proveedores de aplicaciones y plataformas de contenidos para adultos adheridas a esta herramienta.
Con el chiste atrás de la regulación digital, Pedro Sánchez multiplicó más secretarías que Manuel Adorni o Alberto Fernández.
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— @jgarciaherrero@masto.ai (+bsky.social) (@jgarciaherrero) July 1, 2024
¿Qué significa tener solo 30 credenciales?
El sistema se diseñó para evitar que los menores accedan a través de dispositivos de adultos, incorporando una doble autenticación. Las credenciales se emitirán en lotes de 30, con una caducidad de 30 días, para minimizar riesgos y evitar la trazabilidad. Este enfoque se alineará con el estándar europeo eIDAS2, que exigirá a las plataformas de contenidos aceptar el uso de carteras europeas de identidad digital a partir de octubre de 2027. El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) también colaborará en este proyecto, gestionando un listado de páginas con contenido para adultos fuera de la jurisdicción española.
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Los antecedentes.
El Ejecutivo español ha querido implementar un sistema pionero, aunque otros países ya han intentado abordar este problema sin éxito. Algunos se han rendido, otros se han conformado con métodos menos efectivos, y los que han implementado controles estrictos han visto un aumento en el uso de VPN y el acceso a contenido menos controlado. En Francia, se explora la implementación de un sistema similar al español.
Hace un año, en plena precampaña de las generales, Alberto Núñez Feijóo anunció su intención de impedir que un menor “pueda tener acceso a páginas de Internet que son absolutamente impropias”. Pedro Sánchez también adelantó un plan con el mismo objetivo. El PP quería ir más allá, regulando no solo el acceso de los menores sino también los contenidos, y que las operadoras se encargaran de los vetos, una solución con importantes riesgos de privacidad. Según una encuesta del CIS, un 93,9% de los encuestados está a favor de “restringir o prohibir” el acceso de menores de edad a páginas con contenido para adultos.
Verdades y mentiras de la ‘app’ antiporno.
El eurodiputado y personalidad de internet Alvise Pérez, que representa al partido ‘SALF‘ (alias Se Acabó La Fiesta), afirmó en sus redes sociales que “España será el primer país del mundo donde masturbarse a diario será ilegal”.
Si bien lo que dice Pérez es fake, es un reflejo de lo que entendió en inconsciente colectivo español cuando se anunció la medida.
A pesar de lo que aparentan algunos titulares, un adulto será libre de entrar en tantas webs de contenido para adultos como desee y ver tantos vídeos como quiera durante tiempo ilimitado. La confusión surge del empeño en detallar las especificaciones técnicas del sistema.
En criollo, la app que verifica la edad cuenta con 30 tarjetas anónimas que le demuestran al portero que el usuario es adulto (las credenciales). Cada tarjeta se puede sellar diez veces en cada sitio distinto, para evitar que una tarjeta tenga tantos sellos que permitan perfilar al usuario.
El lote de 30 credenciales, que se entrega al usuario cuando solicita a la app que verifique su edad, caduca a los 30 días. Cuando quedan 3 días para que caduquen o solo 3 credenciales, se podrá pedir un nuevo lote. Transformación Digital explica: “Será necesario, por tanto, identificarse de nuevo y cotejar la mayoría de edad. Todo el lote activo hasta ese momento se elimina para evitar su uso y la acumulación de credenciales no necesarias”.
El poder del gobierno español para imponer la app solo alcanzará a las empresas radicadas en España, que son una ínfima minoría.
El sistema está en fase de desarrollo y se espera que esté disponible para en todo el país al final del verano español. En ese momento, los proveedores de contenido para adultos establecidos en España tendrán que estar listos para saber sellar esas tarjetas y así entrarán en la “lista blanca” de webs permitidas en el país. El Gobierno intentó meter a todo el sector tecnológico en su plan, y ya ha mantenido reuniones tanto con operadoras como grandes tecnológicas como Apple, Google, Meta y Microsoft.
Este plan está pensado para los grandes portales de contenidos para adultos. Pero buena parte de los vídeos circula en redes sociales y aplicaciones de mensajería como WhatsApp y Telegram. Carmen Cabanillas, directora general de Gobernanza de Transformación Digital, explicó: “Si estás usando Telegram y estás intercambiando contenido para adultos, Telegram tiene la opción de llamar a nuestra aplicación y verificar que eres mayor de edad antes de que emitas o consumas ese contenido, es voluntario”.
Todo muy lindo con las voces oficiales, pero fuera del gobierno los opositores e independientes califican a esta aspiración voluntaria como «pura fantasía«.
Flojo de papeles para la privacidad
La Cartera Digital emitirá tarjetas que confirmen la edad, pero también el carné de conducir, el certificado de empadronamiento, el DNI, datos fiscales, titulaciones y hasta la “ausencia de antecedentes por delitos sexuales”. Sin embargo, si se pone en marcha en septiembre únicamente para verificar la mayoría de edad en webs para adultos, es razonable pensar que se descarga con ese fin. Los especialistas en privacidad han expresado preocupaciones sobre el control de las claves criptográficas del sistema y la posibilidad de que los Estados miembros puedan ver los registros de actividad de los ciudadanos.
El Gobierno reconoce que los usuarios podrían utilizar herramientas como VPN para eludir estos controles. El Instituto Nacional de Ciberseguridad gestionará “un listado de páginas con contenido para adultos no sometidas a la jurisdicción española con el objetivo de que los navegadores puedan verificar la mayoría de edad antes de presentar sus contenidos”.